domingo, 1 de marzo de 2009

La fe de Obama I

Voy a tratar de resumir aquí el capítulo "Faith" del libro de Obama titulado "The audacity of hope". Seguramente no tendré tiempo de hacerlo esta tarde pero deseo, al menos, poner de relieve la ágil prosa narrativa del presidente. Al comenzar su capítulo, Obama hace un repaso del estado de la fe religiosa, no sólo la cristiana pero ésta en especial, en los USA de nuestros días. Me ha interesado mucho su posición religiosa. Traduzco libremente: "Cada día miles de americanos se ocupan de sus tareas cotidianas -llevar a los chicos a la escuela, conducir a la oficina, ir a las reuniones de negocios, hacer la compra, intentar cumplir con sus dietas- y llegan a darse cuenta de que algo les falta. [...] Necesitan un sentido de propósito, un arco narrativo para sus vidas, algo que les libre de la soledad crónica o que les levante por encima de los trabajos incesantes y agotadores de la vida diaria. Necesitan una seguridad de que alguien out there, ahí fuera, se ocupa de ellos y los escucha. Una seguridad de que su destino no es sólo viajar por una larga carretera en dirección a la nada." Da la casualidad que yo personalmente creo que viajamos por una larga carretera en dirección a la nada, pero me interesa mucho oir hablar a personas especiales acerca de su experiencia religiosa. Máxime en un caso como éste de Obama en el cual las dudas no desaparecen nunca. Nos dice que no se educó en un hogar religioso y que su madre, que se inclinaba a lo religioso en un sentido amplio detestaba la religión organizada que con frecuencia manifiesta una cerrazón de mente bajo el aspecto de compasión y esconde crueldad y opresión bajo el aspecto de sentido de la justicia. Dice que su madre poseía un continuo sentido de la maravilla, una reverencia por la vida y su preciosa naturaleza transitoria que podía describirse adecuadamente como devota. Su madre veía misterios por todas partes y se alegraba en la aguda extrañeza de la vida. Este asunto es interesante y quiero dejarlo aquí como una primera aproximación a este tema que considero muy importante.
Tras esta referencia a su madre Obama nos introduce directamente en las comunidades negras de creyentes donde "las líneas entre el pecador y el salvado eran más fluídas: los pecados de los que venían a la iglesia no eran muy diferentes de los pecados de quienes no venían, así que podíamos hablar de todos ellos con sentido del humor o condena." La frase más importante de este primer momento de Obama es cuando entró en la Trinity United Church of Christ y fue bautizado: "it came about as a choice and not an epiphany ". Fue una elección y no una revelación. Quiero subrayar aquí que frente a la fe mágica y dogmática de Bush, la fe de Obama se parece a lo que aún yo mismo puedo considerar que tengo. Una fe dramáticamente insegura que se enfrenta ante el misterio y la nada con todas las cuestiones en carne viva y que se apresta a convivir con la falta de respuestas, con el silencio de Dios.

5 comentarios:

  1. ¡Qué bien despertar leyendo estas cosas! Quiero decirle, Álvaro, que anteayer anduve ojeando algunos pasajes del libro de Harold Bloom "La religión americana", que me pareció aclara bastante bien este panorama tan complicado de las religiones estadounidenses, que pareciera que estamos en Asia de tantas y tantas que hay.

    También quiero decirle que desde que descargué los documentales de Adam Curtis para la BBC, veo todo de otra manera. Lo tiene en la edición inglesa de la Wikipedia.

    Un saludo desde Valencia y enhorabuena por el blog. Desde aquí lanzo mi deseo de invitar a Obama a darse un baño en la Segunda con su perro y a invitar a la familia a un buen rape a bordo de la Regina Pacis camino de Somo.

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  2. Siento mucho que su candidatura a senador no fuera aceptada por escasos votos de diferencia sobre la novena candidatura,estoy seguro que el sillón del senado lo hubiera encontrado mas cómodo y reconfortante que el de la real academia de la lengua

    PD.:
    ¿Cree usted que algún día sera posible dotar con una sauna,al palacete de la real academia de la lengua ?

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  3. Me alegro de que el señor Obama sea un creyente menos fundamentalista que el anterior inquilino de la Casa Blanca. Ahora bien, yo, en mi oceánica ignorancia, tenía para mí que los americanos -al menos el americano medio que conocemos por telefilmes y películas casi mejor que a nuestros vecinos de escalera en ciertos aspectos- se distendían de la mecánica de la vida cotidiana -tan mecanizada y ligada a artefactos técnicos que van del automóvil al teléfono móvil o los múltiples chismes tecnológicos como palm's, videojuegos, etc- con cosas más simples, sencillas, en consonancia con su modo práctico de entender la vida: el deporte sobre todo. La pesca, el fútbol (americano, desde luego), el béisbol, el basket. Que el deporte era ese bálsamo para la rudeza de los días... que ni siquiera pide una trascendencia.

    Seguramente sea un tópico falso.

    Muchas gracias por sus comentarios. Un saludo

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  4. Habria que replantear la afirmación de Monroe, y decir "DIOS para los Americanos". Parece como si Dios fuese para ellos algo propio, que no atañe a los demas, sin duda por culpa del protestantismo que esta en la base de toda la sociedad americana y sus estructuras (como bien nos explicó Weber). Religión, familia, patria, banderitas por todos los lados...resultado: capitalismo brutal y fundamentalismo cristiano egocentrico. Resultado: terrorismo internacional.

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  5. Kike. Muchas gracias por su comentario del 2 de marzo. Me alegra que le anime leer mi blog de Obama por la mañana. También yo he leído el libro de Harold Bloom sobre las religiones americanas, que me divirtió mucho. Bloom es evidentemente un agnóstico y no puede remediar como yo mismo reírse de algunas grandes exageraciones del fervor religioso. Precisamente porque leí ese libro en su día hace ya tiempo, he querido empezar comentando en este blog lo de la fe de Obama, que me ha parecido singularmente limpia, con una clase de religiosidad cristiana que se enfrenta al vacío y al silencio de Dios como yo mismo. Hay muchas más cosas que decir y ya las iré comentando a lo largo de estos años. muchas gracias por su comentario.
    Álvaro Pombo

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